Crédito: J. Markwirth, Goethe Universität Frankfurt am Main

Líneas de investigación

Medio ambiente

La palinología, antracología y carpología permiten reconstruir el paisaje vegetal que explotaban los grupos humanos, conocer los cambios ambientales que se han producido desde época prehistórica hasta la actualidad, y documentar la adaptación de los grupos humanos a su entorno.

Crédito: Jon Aldaia/Palaeorigins

Subsistencia

El estudio de los macrorrestos vegetales permite caracterizar las estrategias de subsistencia empleadas por las sociedades prehistóricas, como la recolección de plantas silvestres, o los sistemas de producción de alimentos basados en especies domésticas, como la agricultura. Los estudios arqueobotánicos aportan datos clave para conocer los procesos de selección de especies (preferencia de especies), sus usos (alimentación, combustible, materias primas, construcción), y los modos de explotación utilizados (cultivo intensivo/extensivo, translocación de especies, gestión de bosques mediante el fuego o la poda). 

Alimentación

Los residuos de comida, semillas y frutos conservados en los yacimientos arqueológicos aportan información relativa a los hábitos de alimentación y prácticas culinarias. También nos aportan datos sobre el origen y evolución de los alimentos que consumimos hoy en día, como el pan o la cerveza. Mediante el estudio de los restos de comida de yacimientos arqueológicos es también posible caracterizar el rol social y cultural que jugaron los diferentes productos (alimentos básicos, de prestigio, comidas y bebidas utilizadas en rituales etc.).